Capitulo 3. La verdad se sumerge

Nuestros héroes cansados del día, deciden descansar y seguir buscando las pistas en la mañana, el grupo se dirige a la pluma del estudiante y dirigirse a sus respectivas habitaciones, no sin antes preguntar a la matrona sobre la clériga, cuya respuesta fue negativa, el arquero Jon lanza una plegaria deseando que se encuentre bien.

A la mañana siguiente los héroes deciden ir inmediatamente a la casa de Lucius, pero antes pasan por el templo para hablar en secreto con Egil, Tauriel es la indicada quien lo encuentra y menciona el avance de la investigación, así como la situación actual de su hermana, Egil preocupado pues ya son dos personas que han desaparecido, le encomienda a Tauriel la vida de los dos y le entrega la dirección de la casa de Lucius.

Una vez allí, los héroes encuentran el lugar desordenado, no ven nada extraño, además de una mancha de sangre en la pared y otra en el suelo, mientras Tauriel revisa el escritorio, Adgamis encuentra una trampilla que conduce a un sótano, en el mismo Adgamis aprecia que este gigantesco sótano solo posee unas librerías a lo largo pero sin nada de libros, curiosamente la madera de las librerías no combina para nada con el sótano, ya que este está completamente empolvado sin embargo las librerías se encuentran limpias y con olor a madera nueva como si fueran recién compradas.

Tauriel en su búsqueda logra ver un fondo doble en el escritorio y encuentra el diario de Lucius, en él, se detallan los extraños sueños que ha tenido el bibliotecario y de su búsqueda de recuperar su memoria.

Mientras Tauriel lee las entradas del diario, una silueta de alguien advierte a Jon, este saca su arco y lanza su flecha, la silueta escapa por lo que Jon emprende su persecución, la silueta de un joven corre por las calles concurridas de gente, mientras Jon lo persigue desesperadamente, el joven logra perderle a su perseguidor, mientras Jon maldice en la lejanía, en este momento Jon choca con alguien familiar para el, su hermana Azgheda.      

Azgheda con felicidad se abraza con su hermano y Jon le comenta toda la situación, además le comenta de sus sospechas que Lucius el bibliotecario es el causante de la destrucción de su bosque, Azgheda acepta la información y se propone ayudar a su hermano, en primer lugar es buscar al sujeto que Jon perseguía, por lo que la druida envía a su águila Jibril para que inspeccione el lugar.

Mientras tanto en un lugar muy lejos de aquí, Crystal despierta con un fuerte dolor en la cabeza, no se sabe cuánto tiempo estuvo inconsciente, Crystal se intenta levantar pero se encuentra amordazada el lugar se encuentra débilmente iluminada por antorchas cuando unos hombres entran en la habitación, seguidos por alguien muy bien vestido con túnicas blancas y con un par de anteojos en su rostro, Crystal lo reconoce ¡Es Milos!

El clérigo con una sonrisa menciona lo siguiente: “Nuestros planes serán realizados, no podrán hacer nada para detenernos, espero que lo entiendas mientras viajes a encontrarte con nuestro Dios, me alegro por ti pues lo verás antes que nosotros”

Crystal no lo entiende pero una vez que Milos se levanta, un brillo amarillo en sus ojos similar a las serpientes destella entre la luz de las antorchas, Milos levanta la mano y sus hombres atacan sin piedad a la indefensa clériga dando por concluida su vida.

En la casa de Lucius el grupo espera al explorador Jon cuando este regresa con su hermana, luego de las presentaciones, los aventureros deciden volver al templo, pero en ese momento Jibril encuentra al joven que Jon estaba persiguiendo, por lo que Azgheda guía al grupo al lugar mediante el vínculo con su águila.

Los cuatro siguen los pasos en dirección a donde está el joven llegando al templo de Boccob, el grupo esperó por la distancia al joven cuando este se encuentra con alguien familiar para ellos, Milos quien en la distancia se ve molesto con el joven, luego del encuentro del par, cada uno sale por su lado, por lo que el grupo tuvo que decidir a quién perseguir, inmediatamente Tauriel sin decir a los demás decide ir por Milos, el grupo pensando en la suerte que podría correr la picara si continua sola, deciden acompañarla.

Luego de perseguir a Milos por las calles, el grupo ve que el clérigo entra a una casa abandonada, por lo que después de un tiempo deciden entrar, preparados en armas, los cinco rompen la puerta e ingresan a la casa encontrándola vacía.

Tauriel busca por el suelo encontrando una trampilla que conduce al sótano, el lugar se ve bastante oscuro, por lo que Adgamis enciende una linterna y se coloca en la retaguardia junto con Jon para proporcionar iluminación al lugar.

Tauriel al frente desciende para buscar alguna posible trampa que los enemigos posean seguidos de Guts y Azgheda y por ultimo Adgamis con Jon, una vez abajo lo que pueden ver es una vieja bodega de vinos, por lo que frustrados el grupo busca algo más, Jon detecta que este sótano es bastante viejo y los cimientos no concuerdan con la casa, por su lado Tauriel logra ver una puerta secreta apostada dentro de uno de los barriles de vino.

Al entrar por el lugar unas escaleras llevan a nuestros héroes a un nivel inferior, donde el pasillo gira al horizonte y pueden apreciar una puerta, en ese momento una criatura humanoide monstruosa con apariencia de serpiente abre la puerta y con un grito ensordecedor lanza una jabalina al grupo, sin pensarlo demasiado Guts carga contra el monstruo, sin embargo una trampa hace que Guts caiga en un foso lastimándole el pie, e impidiéndole continuar con la batalla, mientras eso ocurre Tauriel salta por el foso logrando ponerse en cara con la criatura pero lamentablemente de una puerta secreta más de esas criaturas atacan sin piedad a Tauriel, Azgheda se lanza al ataque con su bastón, el cual lo mejora con un conjuro druídico, mientras Jon lanza más flechas a los monstruos que atacan a Tauriel, por su lado Adgamis ayuda a subir a Guts con una cuerda, gracias a la fuerza de la recién llegada Azgheda, el grupo logra salir victorioso de esa batalla aunque con mucho daño.

Mientras llegan al otro lado del foso, Azgheda utiliza sus conjuros para curar a Guts y Tauriel, mientras Adgamis decide avanzar cuidadosamente por el sendero en el que salieron los monstruos viperinos, Jon decide acompañarla y juntos llegan a una sección del pasillo en donde aparte del camino existe otra puerta secreta que, en cuanto la abren descubren una sala repleta de esqueletos reanimados quienes escuchan el movimiento de los aventureros y se dirigen al lugar, Adgamis con Jon inmediatamente cierran el lugar moviendo la roca que abre la puerta secreta, en el transcurso un brazo esquelético queda atrapado por la inmensa piedra, Adgamis y Jon deciden regresar con el grupo.

Una vez los cinco nuevamente Jon informa de lo que descubrieron así que deciden ir por ahí, logran llegar a la sala pero con horror descubren que aparte de los esqueletos también hay más de estos seres viperinos quienes se disponen a atacar, esta vez la espada de Guts fue de gran ayuda para vencer a las serpientes humanoides eliminándolas a todas con su gran maestría, mientras que Adgamis y Azgheda utilizaron sus conjuros para mantener a raya a los muertos vivientes, sin embargo al ser demasiados esqueletos, el grupo decide encerrarlos en el cuarto, por lo que los cinco salen al otro lado de la habitación.

Una vez afuera, el grupo se encuentra con un pasillo que se extiende por el sur, a lo largo del mismo hay una puerta que conduce a otro lugar, posiblemente una habitación,  el grupo decide abrir la puerta y mirar en el interior, lo que aprecian es una vieja biblioteca con muchos libros y pergaminos en el escritorio y los estantes junto con una lámpara que ilumina con sombras la habitación.

Adgamis y Tauriel revisan los libros y Jon los pergaminos, mientras Guts y Azgheda vigilan que más enemigos no los ataquen, el grupo descubre un libro encuadernado con cuero negro y acabados de plata este libro posee como título El libro del innombrable, adquiriendo alguna información Adgamis abre el libro, pero una aura maligna se apodera de ella consumiéndole su sabiduría y dejándola mareada. Azgheda golpea inmediatamente el libro cayendo el mismo en un rincón de la habitación.

Tauriel por su lado descubre entre los pergaminos notas acerca de la construcción del faro y una nota que expresa lo siguiente: - Nuestros preparativos ya están casi completos, llegaremos a Freeport en las fechas previstas, asegúrate de que todo esté dispuesto para nosotros, la hermandad cuenta contigo. N`Tal –

Tauriel descubre que aparte de Lucius, la construcción del faro tiene algo que ver con fuerzas que ni ella comprende, Jon también menciona el impío libro que Adgamis tocó y el título del mismo “El innombrable” suena como algo más importante que todo lo demás, por lo que decide llevarse el libro, sin embargo el grupo no está de acuerdo por la maldición que pesa sobre el mismo, con frustración Jon acepta dejarlo, pero el título quedará para preguntarle a los clérigos una vez salgan de acá.

El grupo sale y se dirige por el pasillo hasta unas puertas dobles de roble, curiosamente las puertas no están cerradas, por lo que el grupo las abre de par en par, una vez adentro ven lo que parece una especie de templo maligno con un enorme altar de basalto negro y encima una estatua monstruosa con forma de mitad hombre y mitad reptil.

Detrás del altar dos sujetos encapuchados se encuentran con ballestas cargadas apuntando hacia nuestros héroes y más allá la figura de otro hombre encapuchado se asoma, cuando se descubre la capucha, sus gafas características revelan que es Milos, quien sonríe y dice: “Son los primeros extranjeros en entrar en el templo del innombrable, su hazaña merece una felicitación, ¡el encontrarse con nuestro Dios en el otro mundo!

Al iniciar la batalla los poderes de Milos desorientan a nuestros héroes, en primer lugar reduce a Guts inmovilizándolo, los ballesteros acaban con Jon con sus virotes, Tauriel se acerca al clérigo y lo ataca con su estoque pero de su túnica una fuerza con forma de escudo evita el daño, Milos logra asustar a Tauriel quien sale huyendo del lugar, Azgheda y Jibril acaban con los súbditos de Milos, mientras Adgamis ayuda con su bastón mágico de defensa para dar mayor armadura a sus compañeros.

Con superioridad Milos les reprocha a los aventureros diciendo cosas como: “Nunca entenderé porque están tan interesados en ese bibliotecario, es un ser insignificante en el orden global de las cosas, sin embargo, he de confesar que me divierte que vayan a morir por el” Las palabras desaniman a Adgamis, quien junto con Azgheda, son las únicas que se encuentran de pie, pero por suerte, la voluntad de Guts prevalece y logra superar su parálisis, por lo que una vez salido del hechizo logra asestar un  golpe con su espada en el cuerpo de Milos.

Milos se desploma en el suelo, con su sangre empapando las baldosas del blasfemo templo. Lentamente, levanta su cabeza por última vez, y diciendo con voz exclama: “¡Por el signo amarillo, dominaremos!” y luego fallece, mientras Azgheda cura a Jon, Adgamis y Guts se dan cuenta horrorizados que Milos se transforma en un hombre serpiente, por lo que los aventureros maravillados se preguntan cómo pudo engañar este ser a la ciudad durante tanto años y si hay más de estos seres escondidos a plena vista.

Luego de buscar por el lugar, nuestros héroes encuentran a Lucius escondido detrás del templo cuyo aspecto es el mismo del sujeto que quemó el bosque de Jon, el arquero sin demora ataca al inválido bibliotecario, pero los demás incluyendo a Azgheda detienen al explorador, Lucius suspira y luego de agradecer a los héroes se disculpa con Jon explicando que no sabe nada de lo que el realizo durante seis años, explica que luego de regresar su memoria, busco ayuda con los clérigos de Boccob, quien solo Milos quiso ayudarlo, aunque luego descubrió que fue una trampa por el mismo clérigo para conocer acerca de su tiempo sin memoria, Milos le pregunto sobre entidades extraplanarias torturándolo constantemente, hasta el punto de intentar asesinarlo, cosa que pudo ser realizada si no fuera por la intervención de nuestros héroes.

El grupo lleva a Lucius junto con Egil, quien lo agradece y los recompensa con el dinero prometido, aunque ahora se siente preocupado por su hermana, nuestros héroes prometen al clérigo encontrar a su hermana y regresarla sana y salva, mientras juntos caminan hacia la posada de la pluma del estudiante para descansar, una sombra se cierne detrás de ellos, pero eso es historia para otro día.